¡Nada mejor que un concierto de jazz!
Así que el día 1 retomé el camino del Sunset, uno de los clubes de jazz de la calles des Lombards, justo al lado del forum des halles y me apunté para el concierto del día.
No sé si fue por el frío o por la resaca de nochevieja pero en esta zona normalmente muy concurrida no había ni un gato pelado y eso daba a la fuente de los inocentes un encanto especial.
A las ocho y media entré en el club y conseguí mi sitio preferido. Un mojito bien preparado me ayudó a esperar mientras se llenaba la centena de asientos que cuenta el Sunside.
A las nueve y media Stéphane Belmondo y sus músicos llegaron y el concierto pudo empezar. Proponían una exploración del universo musical de Steevie Wonder y empezaron por uno de los temas más populares de este proyecto.
Desgraciadamente el público contaba muchos espectadores de azahar poco al tanto de los rituales de los clubes y, al principio, eso despistó a los músicos. Pero los viejos feligreses del sitio retomaron el control y la relación músicos-público tan especial de las salas pequeñas pudo establecerse.
Una hora de música,
15 minutos de pausa,
otra hora de música,
otra pausa y una última sesión de música…
o sea casi 3 horas de concierto y un momento estupendo cuando tocaron the secret life of plants
Empezando así, el 2009 no podrá ser malo…
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Como ya lo habrás notado los «espectadores de azar» sumergidos en un baño de azahar resultan menos pesados 🙂
Eso es lo bueno de los idiomas: un error al azar y surge una flor que despierta la imaginación…
Me apunto el nombre del Sunset y lo visitaré en mi próxima estancia en Paris. aunque yo sea una espectadora de «azar»… ¿era un guiño del lenguaje eso del «azahar»? En cualquier caso, quedó bonito.
Una forma genial de empezar el año. ¡Claro que si!