La nueva ley acerca de los datos abiertos impone que las administraciones dejen un acceso gratuito a los datos que poseen. No sé si son muchas las personas que miran estos datos pero acabo de pasar un rato interesante recopilando estas informaciones.
Para empezar consulté las informaciones de haciendas acerca de los ingresos. Si no tienen evaluaciones de sueldos medios, proporcionan datos acerca de los «ingresos fiscales de referencia» de 2015.
El promedio galo llega a 25874€ mientras el promedio parisino alcanza 41011€. Pero dentro de París no todos llegan a este nivel. Dentro del distrito 18, el promedio «apenas» alcanza 26400€ y al lado de mi estación de metro, anuncian 23849.
Eso parece confortable mientras no miras otros datos abiertos acerca de los alquileres. Los precios de referencia que encontré para mi barrio rondan 26€ por metro cuadrado, o sea basicamente inasequible 🙁
Para recobrar la moral, miré otros datos abiertos y descubri que Francia alberga 143 gatos para 1000 personas.
También descubrí que 59% de los parisinos leen más de 10 libros cada año cuando sólo son 31% cuando uno contempla el promedio galo.
En cuanto a los desplazamientos, los parisinos son los que más usan las bicis y que más caminan.
El APUR, organismo que estudia el urbanismo parisino, ya público varios mapas para enseñar datos de todas clases acerca de la capital y de sus distritos.
¿Y qué?
Este derroche de datos resulta inexplotable para el ciudadano de a pie. Así que abandoné mi paseo en este mundo digital para ir de copas con unos amigos.