Teoricamente, el lunes de Pascuas es día festivo pero los comercios aprovechan las reglas del trabajo cada día más permisivas para abrir y atrapar a la gente desocupada. Confieso que tras una horita caminando me dejé atrapar y volví a casa con una moqueta verde ideal para transformar mi balcón en jardín…
El martes fue cuando el ex ministro francés de hacienda y presupuesto confesó que tenía cuentas secretas y desde este momento, todos hablan de escándalo.
Y mientras tanto se oyen publicidades en la radio nacional que te invitan a contactar bancos privados para comprar un barco o transmitir tu patrimonio, como si fuera un tema que interesa una parte importante de los que escuchan la radio…
Y mientras tanto anuncian que la cifra de venta de los coches bajo de un 14%…
¡Lo bueno fue que esta semana se nos regaló varios rayos de sol!
Yo aproveché el cambio de hora y los atardeceres que se alargan para otorgarme varias caminatas.
En el distrito 13, recorrí el largo bulevar que se estira entre la plaza de Italia y el Sena. Torres y viviendas para empezar, edificios de oficinas a continuación y en medio día empleados que invaden las panaderías…
En el distrito 20 pasé por la calle «du Volga» en donde se ven varias construcciones olvidadas por la renovación urbana.
En el distrito 11, ubiqué la nueva chocolatería creada por el chef Alain Ducasse al lado de Bastille pero preferí visitar la pequeña fábrica de la calle Saint Sabin para comprar mis tabletas preferidas…
En el distrito 4, ya no se puede caminar tranquilamente el sábado por la tarde…
Y hoy hice un gran paseo por la colina de Montmartre y constaté que ya llegaron los turistas.
Ahora, sólo faltan unos grados extras para estar bien 🙂