Situada a menos de quinientos metros del Arco del Triunfo, la iglesia Saint Ferdinand es una iglesia cuya construcción se acabó en 1957. Tiene una fachada relativamente imponente que esconde un interior de estilo neobizantino iluminado por tres cúpulas.
La decoración me pareció relativamente sobria y el espacio resulta perfecto para una sesión de meditación.
Al salir de esta iglesia, recorrí la calle Saint Ferdinand y encontré una sucesión de tiendas de buena vida. Ni siquiera falta la plaza redonda, con terraplén central y escultura, y varias terrazas en donde sentarse para tomar un café u otra cosa…
Siguiendo rumbo al Oeste, llegué al lado del Palacio de los congresos de Paris y seguí por el bulevar Pereire cuya parte central propone espacios de deporte, aparcamientos y pequeños jardines.
Pasé por la calle Brunel en donde noté, en la parte superior de un gran edificio, una sucesión de relieves representando gatos solos o jugando…
Confieso que no miré los anuncios presentados en el escaparate de la agencia inmobiliaria de la plaza. Esta zona queda a dos o tres estaciones de metro de La Défense y sus torres de oficinas, está al lado del Palacio de los congresos de París y para quien necesita naturaleza, el bosque de Boulogne está a menos de un kilómetro…
Sin embargo, me alegró constatar que a pesar de estar muy cerca del Arco del triunfo, esta pequeña zona parece tener una vida propia, a salvo de las invasiones turísticas.
Al final de la calle Saint Ferdinand, seguí rumbo al Oeste antes de hundirme en el metro…